Anorexia espiritual
Tiempo de lectura: 4 minutosA raíz de un artículo sobre introducir yoga en las escuelas de primaria, La Vanguardia propone una encuesta sobre este tema y me sirve como excusa para tratar un tema que tengo pendiente desde hace tiempo: la anorexia espiritual.
Hay varios conceptos que nuestra cultura ha vivido (y padece) que provocan un rechazo generalizado a la meditación y a cualquier tradición espiritual. El yoga y el tai-chi tambíen lo son, pero al estar orientadas al cuerpo pasan por ser unas técnicas más físicas y de relajación a los ojos incluso de quienes lo practican y no tanto por ser una vía espiritual.
Estoy convencido que si el yoga se presentara como una forma de meditación profunda y no como gimnasia las resistencias y prejuicios se habrían disparado y su aceptación hubiera sido menor. Pero es que el yoga es precisamente eso, una forma de estar aquí y ahora, y con nuestro cuerpo.
Está desmostrado que quienes practican algun tipo de meditacion regularmente son personas con mejor sentido del humor, más abiertas al amor y que superan con más facilidad los problemas, sin tanto sufrimiento. Si tan beneficiosas son sus consecuencias.. ¿qué nos hace sentir rechazo y pereza?
Algunos de los conceptos que siguen afectando a nuestras creencias y, por lo tanto a nuestra vida, son: