Digerir la información
Tiempo de lectura: < 1 minutoDemasiada información. Demasiada. Una táctica frecuente (no de ningún ente supranacional maligno, lo hacemos nosotros continuamente con nosotros mismos) es enterrar la verdad entre un mar de ruido. Y no solo eso. Sino que aquello que es verdad necesita un tiempo para ser digerido. Y de eso no solemos tener costumbre. No es cosa simple esta. Porque eso de saber, de aprender, o de conocer, no es una cuestión objetiva. Yo creía que bastaba con leer, asistir a una clase, hacer un taller o, lo que fuera, para aprender. Y va a ser que no. No nos han enseñado a aprender, sino a repetir o a reforzar. Porque aprender implica algo más cercano a la locura que al orden. Creemos saber una enseñanza por haberla escuchado o asistido a algún seminario. Pero, ¿qué pruebas tenemos de haberla comprendido realmente? No es fácil esta cuestión. Eso de saber, aprender, conocer, no es cualquier cosa, ni rápida.
Ilustración de Jen Duran.