Recibes lo que das
Tiempo de lectura: < 1 minutoDice Alejandro Jodorowsky que «lo que das te lo das, lo que no das te lo quitas». En la bilblia encontramos que “Más bienaventurado es dar que recibir” Hechos 20:35 y en Mateo 12:33 “O haced el árbol bueno, y su fruto bueno, o haced el árbol malo, y su fruto malo; porque por el fruto se conoce el árbol».
Y parece claro que el proceso de madurar pasa por darse para luego poder dar, pero… ¿Cuántas veces nos victimizamos de lo que «nos» pasa? El proceso de madurez es tomar la responsabilidad y asumir qué es lo que yo he hecho para llegar aquí, para recibir este fruto. Pasa por preguntarse con honestidad ¿qué árbol he sido?
Los hijos tambien son fruto. Cuando ellos son violentos y rebeldes o excesivamente sumisos… plantéate qué violencia has ejercido sobre ellos o sobre ti.
Cuando se repite el fracaso en una relación de pareja plantéate que elecciones estás tomando, o poder reconocer que hay pautas que se repiten y que no ves o no sabes cómo cambiar. No hay un plan maligno que busca tu mala suerte. No son «todos los hombres así» ni «todas las mujeres asá». Ya es momento de dejar la queja.
Cuando somos aldultos, y estamos en la libertad de las elecciones, recibimos lo que damos. Seamos conscientes de ello o no.