En primera persona
Tiempo de lectura: < 1 minutoSolemos decir: «me hace sentir bien, o mal, o me pone nervioso/a, me da mucha paz…» Pero en realidad es una distorsión de la realidad. Nadie puede «hacerte sentir algo», sino que las circunstancias y sus actos, dependiendo de mis disposición, apertura y sensibilidad (sean estas conscientes o inconscientes), producirá una reacción en mi. No es una simple cuestión de lenguaje, sino que refleja una cultura en la que no nos hacemos responsables de lo que sentimos o no sentimos.
Ponemos en «el otro», afuera, lo que nos pasa. Y mientras que por un lado es una evitacion de nuestra responsabilidad, al mismo tiempo, otorgamos un poder «al otro» o a «lo otro» enorme y que no le corresponde.
Hazte presente en tu propio lenguaje, transforma tu forma de hablar, y tu realidad se irá transformando. Cambia el «me hace sentir» por el «yo siento». Desde ahí podrá surgir la siguiente pregunta: ¿qué hago yo para sentirlo o qué hago para no sentirlo? En el momento en el que te pones en primera persona en tu lenguaje, te pones en primera persona en la vida. Soltar la pseudocomodidad del espectador pasivo, para ser un co-creador del presente.